Se trata de un edificio situado en el chaflán de la Gran Vía de las Cortes Catalanas con la calle Roger de Llúria. Constituido por una planta baja, un entresuelo y seis plantas altas con una cubierta plana que aloja las instalaciones. Además dispone de tres plantas sótano destinadas a aparcamiento. El edificio se reformó integralmente entre los años 2000-2002.

El edificio original fue construido a finales del siglo XIX, siendo sometido posteriormente a 1892 a una reforma de la fachada y sus interiores. Posteriormente el edificio fue objeto de una remonta al año 1959. Este edificio fue reformado integralmente alrededor de los años 2000-2002, con el derribo de todo el edificio sólo manteniendo parte de la fachada del mismo. La fachada, sin embargo, también fue objeto de alguna reforma compositiva como la supresión de los balcones de las dos plantas superiores y la modificación de algunos agujeros de planta baja, como la creación de un acceso principal y un acceso para el sótano.

El promotor encarga el proyecto ejecutivo y posterior dirección facultativa de las obras de restauración de la fachada principal del edificio, raíz de algunas patologías aparecidas en 2015 situadas en los balcones.

Resultado del estudio cromático, de las calas efectuadas para verificar la composición del paramento y del análisis realizado de acuerdo con los criterios establecido por el departamentos de Patrimonio arquitectónico, Histórico y Artístico del Ayuntamiento de Barcelona, ​​se plantea una actuación con la voluntad de recuperar el contraste cromático de los diversos elemento de la fachada y la reparación de los estucos de paramentos con mortero tradicional del cal.